En diálogo con Radio Mitre, Adelmo Gabbi manifestó el apoyo de la BCBA al entendimiento entre la Argentina y el organismo de crédito, pero formuló una dura advertencia: “La deuda que se está acumulando actualmente es la más grande de la historia argentina. Es necesario cerrar urgentemente este acuerdo con el Fondo porque la situación va a ser mucho peor».

Tras su visita al Congreso de la Nación, en el marco de la aprobación parlamentaria del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), Adelmo Gabbi habló con la prensa para ofrecer el punto de vista de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires sobre el entendimiento financiero. Entrevistado en Radio Mitre por el periodista Eduardo Feinmann, el presidente de la BCBA fue directo y categórico: “En el Congreso no quedaba otra posibilidad que decir que hay que acompañar el acuerdo con el Fondo, porque si no sería la destrucción de lo poco que queda de la economía argentina. Pero aquí lo importante es preguntarse qué va a pasar después del acuerdo. ¿Tendremos alguna vez un plan económico? ¿Qué va a suceder? ¿Cuál es el futuro? ¿Qué capital internacional puede venir a la Argentina en estas condiciones?”.

Sobre la incertidumbre acerca del programa económico que debiera acompañar al acuerdo financiero con el FMI, Adelmo Gabbi fue taxativo: “El plan económico ni existe… No es siquiera un ‘vamos viendo’. La realidad es que el endeudamiento con el Fondo apenas representa el 13% de la deuda total de la Argentina: el país debe más de 340.000 millones de dólares y al FMI se le deben 44.000 millones. Y en apenas dos años se ha tomado deuda en pesos por encima de los 53.000 millones de dólares en Letes y Lelics, que todos los meses generan intereses. Si en los últimos dos años hemos acumulado semejante deuda, ¿cuánto llegara a ser dentro dos años, una vez cumplido el actual mandato presidencial? Va a ser una cifra escandalosa”.

“La realidad es que la situación va a ser mucho peor y es necesario, urgentemente, cerrar esto con el Fondo”, previno Gabbi. “El acuerdo se podría haber hecho hace un año, con muchos menos inconvenientes y con alguna conveniencia para el país; porque aquí, lo único que va a recibir la Argentina es lo que ya le ha pagado al FMI: no va a recibir nada más. Pero si ya el propio acuerdo con el Fondo no va a significar mucho a favor de la Argentina, el ‘no acuerdo’ –un default– sería algo absolutamente terrible, porque al país no le quedaría ningún camino. Aquí sucede algo que no ocurre en otros lugares: hay países que tienen una deuda mucho mayor que la nuestra respecto de su PBI (Estados Unidos, por ejemplo), y hay otros que tienen escasa facilidad de pago de su deuda (Grecia o Ecuador); pero el problema de la Argentina es que acá no hay voluntad de pago”.