El economista José Pablo Dapena resumió así la importancia de transformar el ahorro en inversión a partir de un manejo consciente del propio dinero: “Para poder invertir en instrumentos como Acciones, Bonos o Fondos comunes de inversión, hay que generar excedentes de ahorro; y para poder generar dichos excedentes, es necesario organizar las finanzas personales”.

“La forma más rápida de ganar dinero es dejar de perderlo”. Con esta cita de Jack Welch, el célebre director ejecutivo de General Electric, José Pablo Dapena abrió el Programa inicial de inversión bursátil con aplicación a las finanzas personales. “¿Se me está yendo el dinero sin darme cuenta? ¿En qué estoy gastando? Tengo que saberlo, porque cada peso ahorrado es un peso que se puede aprovechar para invertir”, propuso el Director del Departamento de Finanzas de la Universidad del CEMA en el marco del curso virtual dictado por la Fundación Bolsa de Comercio de Buenos Aires, y enfatizó: “La educación financiera nos permite saber en qué estamos gastando, si estamos gastando bien, si nos estamos endeudando…”.

A la hora de destinar los ahorros propios a la inversión en el Mercado de Capitales, José Pablo Dapena indicó que “hay que generar excedentes de ahorro, y para generar esos excedentes hay que administrar apropiadamente las propias finanzas personales”. En tal sentido, el economista enumeró 4 variables involucradas tanto en las finanzas personales como en las corporativas o nacionales: “Los ingresos (cuánta plata entra), los gastos (cuánta plata sale), la deuda (cuál es su monto y cuál es su costo financiero) y los ahorros (cuánto suman y qué retorno pueden generar)”, y observó: “La mejor forma de tomar una decisión es con conocimiento, y en materia financiera hay que tomar decisiones constantemente: ¿Pongo o no pongo la plata? ¿Vendo o no vendo los dólares? Saber trabajar con las finanzas personales es algo de vital importancia. ¿Y cómo podemos saber si hemos tomado una buena decisión en materia financiera? Lo sabemos cuando obtenemos el resultado que buscábamos”.

Los principios básicos de la administración de las finanzas personales, insistió Dapena, pueden trasladarse al ámbito de las empresas, o incluso de los países: “Como bien dijo el prócer estadounidense Abraham Lincoln, no se pueden solucionar los problemas económicos si se gasta más de lo que se tiene. Y si, tal como reza el eslogan de un partido político argentino, queremos lograr la soberanía política y la independencia económica, tenemos que ser prudentes con las cuentas fiscales. Si continuamente pedimos prestado, nunca vamos a tener soberanía política –porque siempre nos van a estar diciendo lo que tenemos que hacer– y tampoco vamos a tener independencia económica –porque siempre vamos a estar condicionados por el gasto desmedido–”.
“El crecimiento económico necesita del aporte de capital, y el capital, a su vez, necesita del financiamiento”, explicó el profesor de la UCEMA. “Si no hay mercado de capitales, el ahorro no puede fluir hacia la inversión. El mercado de capitales es uno de los principales elementos de movilidad social ascendente, junto con la educación y el trabajo. Supongamos que se me ocurre una idea de negocios: un emprendimiento, pero no tengo dinero para llevarlo a cabo. Si tengo a mi disposición un mercado de capitales desarrollado, puedo armar un plan de negocios, proponérselos a los inversores, conseguir su financiamiento y compartirles mis ganancias. Así puedo aprovechar esa oportunidad de negocios y lograr mi objetivo. Supongamos, en cambio, que no cuento con un mercado de capitales. En ese caso, ¿quiénes son los únicos que pueden aprovechar las oportunidades de negocios?: los que ya poseen el dinero. Entonces, los que tienen el capital, logran más capital, y los que no lo tienen, nunca logran salir de esa situación. Es imposible lograr un crecimiento económico sin el desarrollo del mercado de capitales”.

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