Compañía Introductora de Buenos Aires
Esta empresa cotizante inició sus actividades en 1901 con la importación de artículos variados, para luego orientar sus negocios hacia la industria textil y alimenticia, y más tarde, producir y comercializar los recordados cigarros de hoja con la marca Avanti. Hoy y desde la década de 1960, se la conoce por su marca de sal de mesa: Dos Anclas.
En 1909, la Compañía Introductora de Buenos Aires comenzó a dedicarse a la explotación salinera. Emprendió inicialmente esta actividad en Salinas Grandes, localidad de Macachín de la provincia de La Pampa, y a partir de 1917 obtuvo la concesión para explotar las Salinas del Bebedero, un imponente desierto blanco que ocupa unas 6500 hectáreas, a 35 kilómetros de la ciudad de San Luis, capital de la provincia puntana.
Industrialización y comercialización
El emprendimiento comercial en términos industriales se consolidó definitivamente recién en 1951 con la instalación de la primera línea de lavado, purificado y secado de sal. Para la década del 60, la sal de mesa Dos Anclas ya era una marca familiar en la mesa de los argentinos, y a favor de esta popularidad resultó clave la automatización del envasado del producto a partir de 1963.
Cigarros Avanti
Los cigarros “Avanti”, los más populares en Italia, comenzaron a fabricarse en Buenos Aires en el año 1902, en el barrio de Villa Urquiza. La fábrica ocupaba una manzana y llegó a alojar alrededor de 1500 obreros, que realizaban un trabajo artesanal. La Compañía Introductora de Buenos Aires era la responsable de todos los procesos de la fabricación: recepción del tabaco (principalmente criollo misionero), secado, despalillamiento, armado y embalaje para su posterior comercialización.
En la década del 30, el consumo anual –en una Buenos Aires en la que los inmigrantes italianos superaban el 50% de la población– era de 70 millones de toscanos Avanti. Hacia 1950, la preferencia hacia los toscanos comenzó a declinar, dando lugar al consumo de cigarrillos rubios. Como consecuencia de ello, la Compañía cerró sus puertas en el año 1958.
¿Qué gusto tiene la sal?
En la época en que CIBA lanzó esta publicidad, el legendario animador infantil Carlitos Balá no habría podido prever que con el paso del tiempo Dos Anclas diversificaría su línea de productos, incorporando salsas y aderezos hasta llegar a conformar una gama completa que además de sal, en la actualidad, incluye especias, vinagres, salsas, aceite de oliva, jugo de limón y salsa de soja, entre otros.
La Compañía Introductora de Buenos Aires constituye uno de los ejemplos de la concreción de los sueños de emprender que hay detrás de cada una de las empresas cotizantes que figuran en el panel bursátil, y que lo vienen haciendo, algunas como CIBA, desde hace más de 100 años.