La BCBA estuvo presente en el Barrio Papa Francisco con dos charlas de introducción a las finanzas, dinero e inversión dirigidas a la comunidad. Los encuentros se desarrollaron en el centro de capacitación para emprendedores que lleva adelante la organización no-gubernamental Raíces.

La BCBA ya está estrechamente vinculada con la Escuela ubicada en el Barrio “Papa Francisco”, Villa 20, Comuna 8, de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA). No es para menos, a través de un convenio con el Gobierno porteño celebrado en abril de 2018, la BCBA participó de su creación con la donación de la obra edilicia. La Escuela abrió sus puertas con el inicio del ciclo lectivo de 2019 y a partir de ahí, la Bolsa contribuye desde su esfera de acción y conocimiento al desarrollo de la comunidad que la rodea.

Por eso, allí estuvieron Claudio Zuchovicki, Gerente de Difusión y Desarrollo de Mercado de Capitales, y Manuel Oyhamburu, Director de la Fundación BCBA, para conversar con las personas que se acercaron a participar. En encuentros de 2 horas cada vez se abordaron temas vinculados a las finanzas personales y al desarrollo emprendedor.

“Fue lindo escucharlos”, evocó Claudio Zuchovicki, dando vuelta el sentido de la presentación de hombre exitoso que hicieron de él a la audiencia; y agregó: “sentí que los saqué de eje”. La sencillez con que habitualmente aborda a su público el Gerente de Desarrollo de la Bolsa descolocó a estos jóvenes que esperaban la fría disertación de un funcionario. Zuchovicki los invitó a reflexionar sobre el concepto del éxito, que no necesariamente se asocia al dinero, el poder o el status.

Más concretamente, les pidió que se respondieran a sí mismos la pregunta de “para qué hacen lo que hacen: ¿para ganar dinero, como función social, por entretenimiento?”. La idea era ayudar a quienes ya desarrollan actividades comerciales, como cocinar para el barrio, brindar servicios de logística y distribución y de pintura, a pensar estrategias de desarrollo económico. Para eso, les sugirió plantearse cómo se imaginan en 5 años a fin de adelantarse a lo que será el apetito del consumidor en 2 ó 3 años, y planificar su actividad.

Entre los conceptos vertidos, explicó que “un buen flujo de trabajo es más importante que el capital invertido”; que no deben temer al riesgo, ya que éste “no es bueno ni malo” en sí mismo, sino que se trata de aprender a asumirlo y administrarlo; y que “crear no es lo mismo que perdurar”.

Los chicos no sabían que la Escuela del barrio había sido donada por la Bolsa, y manifestaron que para ellos era importante saberlo. Ajenos al entorno bursátil, demostraron interés en conocerlo. Así, pudieron hacer sus primeros pasos en la jornada de la charla de Manuel Oyhamburu, que además estuvo orientada a las finanzas personales y algunos temas de Bolsa.

“Fue una buena experiencia con emprendedores de la economía popular,” comenta Oyhamburu. “Hablamos de cómo nace un emprendimiento; de hecho, se sorprendieron al enterarse de que muchas grandes empresas del mundo nacieron en un garaje.” Por eso, “el emprendedor tiene que tener pasión por lo que hace y tratar de hacer lo que le gusta; después se verán los frutos. En la charla, se hizo especial hincapié en la importancia de llevar la contabilidad y los números de las finanzas, ya que más allá de que cambia la escala, la lógica financiera de un pequeño emprendimiento es la misma que la de una gran empresa.”

Interesados por saber qué es y cómo funciona la Bolsa, los asistentes se fueron entusiasmados porque de aquí en más, cuando escuchen en la radio o en la televisión “el cierre del índice Merval”, ya sabrán de qué se trata. Además, se enteraron de que el mercado está abierto también para pequeñas empresas. Información útil y para tomar nota.